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Salud

Los podólogos gallegos aseguran que la «prevención» es clave contra el pie diabético

today13 noviembre, 2023

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  • Recomienda a las personas con pie diabético revisar sus pies a diario y usar “siempre” calzado y calcetines
  • Navor Pereira, experto en pie diabético, vocal del COPOGA y miembro de un grupo nacional de calzado para pie diabético: “El 20 % de las úlceras de pie diabético se producen por causa del calzado”

Santiago de Compostela, 13 de noviembre de 2023 (Vía Láctea Comunicación).- El Colexio Oficial de Podólogos de Galicia (COPOGA) considera prioritaria la prevención para combatir el pie diabético, una enfermedad que en España se calcula que tiene una prevalencia del 13% en la población mayor de 18 años y que va en aumento. Así lo manifiesta el Colexio con motivo del Día Mundial de la Diabetes, que se conmemora este martes, 14 de noviembre.

La entidad señala que la diabetes es una enfermedad crónica que aparece cuando el páncreas no produce la insulina suficiente o cuando el organismo no utiliza eficazmente la insulina que produce. Existen varios tipos de diabetes y entre otras complicaciones, puede causar el llamado pie diabético, es decir, la infección, ulceración o destrucción
de los tejidos profundos del pie.

El Colexio explica que la diabetes es la primera causa de amputación no traumática en los miembros inferiores. “La prevención podológica temprana es crucial, ya que a partir de los diez años desde que se instaura la diabetes las posibilidades de riesgo de
complicaciones importantes en el pie aumentan considerablemente. Es decir, un 40 % de las lesiones en el pie diabético se pueden evitar si se diagnostican y se tratan de manera precoz, ya que un 25 % de los diabéticos tienen a lo largo de su vida algún tipo de herida en los pies” –argumenta la presidenta del COPOGA, Ana Requeijo–.

El Colexio recalca que debe ser el podólogo el profesional sanitario que paute un seguimiento del estado de salud de los pies del paciente, adecuado a su estado de riesgo. En el caso de afectación del sistema nervioso (neuropatía diabética), los podólogos gallegos indican que puede causar diferentes síntomas en los pies como hormigueo, dolor, sensación de adormecimiento o falta de sensibilidad, “lo que hace que se pierda la capacidad de sentir daño en el pie y, por tanto, que podamos reaccionar de manera adecuada ante este estímulo, empeorando la situación”.

Por ejemplo, los podólogos explican que esta neuropatía puede impedir que la persona con pie diabético detecte objetos dentro del calzado, o incluso el propio roce con el calzado, lo que puede causar lesiones que se puedan infectar o provocar úlceras que no se traten de manera precoz al no percibir sensación de dolor. “El 20 % de las úlceras de pie diabético se producen por causa del calzado” –indica el experto en pie diabético Navor Pereira, vocal del COPOGA y miembro de un grupo nacional de calzado para pie diabético–. También destacan que, de igual manera, sucede con las queratopatías del pie (callos y durezas) que de no tratarse pueden provocar ulceraciones.

Cuando la enfermedad afecta a la circulación arterial (enfermedad vascular periférica), los especialistas explican que los pies no recibirán suficiente aporte sanguíneo, por lo que a los tejidos no les llega oxígeno ni nutrientes de manera adecuada, lo que hará más difícil recuperarse de heridas e infecciones. En casos muy graves, cuando se produce gangrena o las úlceras no mejoran con los tratamientos médicos o quirúrgicos, el Colexio destaca que puede ser necesario llegar a la amputación del dedo del pie o de parte de la pierna.

Indicaciones prácticas de las podólogas y los podólogos para pacientes con pie diabético

1. Revisar los pies a diario, y prestar atención a cortaduras, llagas, manchas rojas, ampollas con líquido, uñas incarnadas, callos, verrugas plantares, pie de atleta o áreas calientes.

2. Hidratar los pies de manera periódica con cremas hidratantes con urea y mantener a raya la humedad.

3. Cortar las uñas en línea recta con un alicate de uñas y un posterior limado.

4. Usar “siempre” calzado y calcetines. Se deben mantener los zapatos secos y aireados y cambiar los calcetines cada día. Es fundamental acudir al podólogo para que, según el grado de riesgo, le indique al paciente el tipo de calzado a utilizar.

5. Protegerse del calor y del frío. En la playa, se debe usar calzado y protector solar. En invierno, no se deben utilizar botellas de agua caliente en los pies, lo mejor es usar calcetines de lana que no aprieten.

6. Hacer un examen completo como mínimo una vez al año con el podólogo o podóloga.

Escrito por Líder Redacción

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